"¿Quién me enviará entre las nubes
preciosos mensajes de amor…?”
Li Qingzhao
Acá estoy, sentada
a orillas de mi dulce río,
aspirando la fragancia de la luna
que asoma
sobre el fondo de un cielo
de naranjas.
Echo de menos a mi abuela.
La invoco y ella viene.
Huele a hierbas
recién amanecidas;
huele a menta, a salvia, a romero,
a poleo...
Me abraza,
me acuna,
me arropa,
me canta...
El cielo se inclina
para escucharnos.
Sopla el viento.
De pronto, una pluma blanca
casi de algodón,
envuelta en luz
vuela hacia el río
y se deja llevar por las aguas
delicadamente.
Mi alma: toda la blancura.
María del Carmen Názer